Dicen que nada me parece lo mismo desde hace tiempo, que mis sueños se desvanecieron entre ira y rencor. Dicen que se puede ver a través de mis ojos y que mis sonrisas fingidas ya no engañan a nadie.
Dicen que ya nada me afecta y que mi alama está helada...
 Pero no saben NADA.
Las cosas no son lo mismo, es cierto, porque el cambio sucede, la vida sigue ,y yo, con ella. Procuro no mirar atrás, porque es la única forma de afrontar el presente venga como venga.
Una vez me dijeron que la mirada era el reflejo del alma,y justo por eso la reservo para quien yo quiero. Y no, mis sonrisas fingidas ya no engañan a nadie, porque ya he aprendido a no mostrarme distinta a cómo soy o cómo me siento, le gente se irá igual si no le gustas por mucho que sonrías.
Y si, puede que parezca que las cosas no me afectan, pero eso lo dejaré para la libre imaginación de cada uno, los míos saben que me pasa aquí dentro, y con eso me vale.

Ya basta de lecciones por caídas, ya basta de miradas sobre el hombro y ya basta de pegarla por la espalda. Nunca he sido así y no voy a cambiar ahora, demasiado orgullo he conseguido recuperar.
Sólo espero que, cada vez que te preguntes por qué ya no está esa ternura en mis ojos cuando miro, recuerdes que por cada lágrima que yo secaba, una puñalada me llevaba.

Suelo decir que uno se  conoce realmente a si mismo cuando llega a su supuesto límite. Cuando está en ese punto en el que el mundo se le viene encima y no tiene la suficiente fuerza para llevar todo ese peso sobre sus hombros, o eso solemos creer.

Lo que no sabemos es que SOMOS MÁS FUERTES QUE TODA ESA MIERDA, que si queremos, podemos robarle minutos al tiempo y exprimirlos hasta el último segundo. Que PODEMOS DESTRUIR TODO TIPO DE BARRERAS,empezando por nuestras máscaras viejas y que somos capaces de querernos cuando nadie más parece hacerlo.

No sabemos que cuando las lágrimas se han gastado es porque quizás el motivo por el que lloramos no las merece y que siempre hay alguien dispuesto a guardarte las espaldas incluso con todos tus defectos. 

Ya es hora de darnos cuenta de que en este circo, la magia es planeada y calculada, que los sentimientos son caros y las personas cada vez más frías. Y justo por eso, MERECE LA PENA intentar correr con los pies cansados, ser diferente y atreverte a SENTIR algo bonito en este mundo cruel e injusto.

Guerra entre sábanas de marfil.

Quiero inventar un lenguaje nuevo donde no tenga que esconder que cada vez que le beso pienso en esos labios prohibidos. Quiero iniciar una guerra, tu y yo, entre sábanas de marfil, demasiado movimiento para tan delicada tapadera... Quiero pegarte a la pared, y entre lunar y lunar explicarte las razones por las que tenemos que matarnos el uno al otro, destruirnos hasta no quedar nada. Pasión entre reproches y mentiras, otra vez.
Quiero que te enfades, me grites y te quedes cerca, muy cerca, tanto que no puedas contenerte. Quiero reconciliaciones entre lencería y humo.
Deja el perfume de tu piel en cada poro de la mía, vísteme solo con tu camisa. Hazte el duro y luego bésame, tanto que me gastes los labios. Dame una calada de eso, que se me vaya la cabeza y grite, a ver si se compara a los placeres de tu cama.
Se está acabando la noche, no pierdas más el tiempo chico malo, ya te avisé de que te besaría toda la noche y me iría por la mañana.

Al otro lado de la cama

Hace tiempo que quiero confesar, que yo también hice las cosas mal. Que no siempre es blanco o negro, que no todo era malo y feo. Hace días que mi almohada se empapa de confesiones y la noche se hace larga. Que la noche es fría y aburrida, sin tenerte al otro lado de la cama.
Se me olvidó contarte que te llevaría la nieve a tu jardín cada invierno, y te contaría a besos los lunares de tu cuerpo. Que cada beso es distinto, que si no te tengo moriría en el intento, que huele a mi perfume tu camisa, que conseguiría huir de la monotonía...
Hace tiempo que digo que quiero decirte... Pero que si no salen las palabras, léeme los ojos, comprueba en mis labios y experimenta en mi piel. 
Hace tiempo que te digo, sin palabras, que no quiero estar sola en este otro lado de la cama.

El eco del silencio

Vacío, cuando no te falta nada ya por sentir. Dolor.
Culpabilidad, por ser tan insensata de descubrirle lo único que te quedaba a un caza fortunas. Huir.
Lecciones, de cómo ser más fuerte, que no le hacen gracia a tus latidos. Desaparecer.
¿Por qué? Dime, a mí, que de lo único de lo que soy culpable es de no poder fingir.
Tener que comerse las ganas y las lágrimas. Tener que aparentar fortaleza. Debilidad.
El miedo pisando los talones, corres, pero hasta tu propia sombra te delata.
Respira, el humo de esas noches muertas, quema recuerdos.
Silencios. Extraños, mirándose a los ojos.

No una más

No soy ella, y nunca lo seré. No soy el sentimiento de antes, pero puedo ser uno nuevo. No soy el dolor que sentiste, pero tampoco voy a ser el dolor que vayas a sentir. No es que sea distinta, simplemente se dar el respeto que una persona se merece. No es que yo no vaya a huir, sino que me quedaré por alguien que merezca la pena. Y no es que yo le de más o menos importancia a las cosas, sino que cuido a las personas como me gustaría que me cuidaran a mí.
Yo no puedo luchar contra barreras ni puertas cerradas, pero puedo buscar mil y una llaves para abrirlas. Yo no puedo mantener el equilibrio en un terremoto de dudas, pero puedo aferrarme bien fuerte hasta que vuelva la calma. No puedo no quemarme si arden las palabras, pero puedo lanzarme al mar para apagar el fuego. Y yo no soy mejor o peor que nadie, pero si prometo quedarme, lo haré en lo bueno y en lo malo.
Porque yo no soy esta, no así. Y me temo que será misterio.
Que si no es por ti, será por mi.

Hasta el hielo es más cálido

Siempre habrá una palabra que me delate y hable por mí, no para ti.

Puede que se escriba demasiado sobre lo que se siente, el tópico más utilizado. Pero ello no conlleva a que se tenga que leer entre lineas, algunos, saben interpretar miradas... y eso es más importante. Puede que mienta fatal, y que piense que no sirve de nada disimular, pero si uno se construye así, cuando se derrumbe podrá recoger algo de ceniza, si se buscan escusas durante largo tiempo, sin embargo, no quedará nada en ti por lo que salir a luchar.

Puede que me hierba la sangre y se me pare el corazón, pero eso significa que estoy viva. Lo triste sería que no me quedara sin respiración.

Puede que sea peor o mejor, puede que sea mas cauta que temeraria, puede que me quisieran y yo no supe hacerlo, puede que tropiece una y otra vez con la misma piedra, pero un día mirare atrás y tendré algo que recordar.

Ahora toca preguntarse cómo se quiere vivir, como una hoja que se deja guiar por un viento inestable, o poniendo los pies en la tierra y pisando bien fuerte. Sólo uno mismo puede decidirlo, yo ya lo he hecho, ahora te toca a ti.

Un 21 de Marzo

La primera flor, 
fue concebida ayer.
Y hoy, contigo, 
ha nacido la primavera.
Mas las nubes siguen tristes
pues ya no estas a su vera...



La noche parece más oscura
el frío cala más por dentro
Estoy helada, abrázame,
manos de recuerdo



No te vayas aun
no te vayas sin mi
que mis ojos se cristalizan
si tu no estas aquí...

Castillo de arena en pleno oleaje

Hay días de echarte de menos, y días de pintar el cielo de otro azul. 
Hay momentos de debilidad y momentos de fortaleza.
A veces soy orgullosa y a veces vulnerable.
Hay situaciones de querer desaparecer y situaciones de buscarte.
Hay momentos de correr lo más rápido posible y después respirar, y otras de quedarme atrapada en el mismo segundo durante toda una eternidad.
Hay inspiración para escribirte mil canciones y ninguna a la hora de qué pensar.
Hay momentos de superar y otros de quedarme bloqueada.
A veces aprendo de esto, y otras maldigo el momento en el que crecí.
Y es que a veces, sólo a veces, hay momentos de querer olvidar, de razonar... 
Pero entonces recuerdo, que yo siempre fui alguien pasional.

El grito del mudo

Me gustaría ser aquella lágrima que una vez resbaló por tu mejilla,
ese suspiro, esa sensación de querer deshacerte del mundo...
Me gustaría ser esas ganas,ese desvelo de noche,
ese brillo en tu mirada y el motivo de tu sonrisa.
Me gustaría ser ese riesgo que quieres tomar,
ese intento a pesar de lo demás,ese latido acelerado.
Me gustaría ser... 

Esto no estaba dispuesto para ser así, nunca lo imaginé de esta manera...

No quiero estar constantemente jugando a tus pruebas de ver quien aguanta más. No quiero competir para ver cual de los dos demuestra menos lo que esto importa. No quiero tener que estar cuidando mis palabras o mis formas por si te asustas. No quiero dejar de ser yo para ser alguien que a ti te gustaría que fuera...

Siempre pensé que las personas no cambian, tan solo encuentran una razón por la que quieren ser mejores o peores. Y yo, me estoy encerrando en una fachada para defenderme de la tuya, y odio perderme algo de ti.

Si solo quisieras, si solo te atrevieras a sentir, verías que somos nosotros los que hacemos complicado algo tan sencillo como estar juntos.

Duelo constante

Algo que antes parecía tan insignificante y transparente, de repente, se vuelve algo tan jodidamente importante que si no lo tienes sientes que no has dado suficiente, que no has luchado como realmente sabes.
Es cierto eso de que lo prohibido hace que lo desees con más fuerza...todos gritándole a tus oídos, escupiendo víboras y estrujándote el estómago y tú, por mucho que a veces sepas que tienen razón,sigues cerrando los ojos,tapándote los oídos y sellando tus labios.
Te importa una mierda la multitud, porque la causa de tus problemas es a la vez, la única maldita razón por la que tantas veces has querido deshacerte del resto del mundo, porque nada falta si estáis juntos.
¿Y qué mas da? Al final,somos todos un poco masoquistas; por mucho que la razón nos diga, si el corazón nos dice lo contrario correremos tras ello como si en eso se nos fuera la vida... Irónico.
Y ahora, quiero saber de una maldita vez, si vas a seguir siendo un jodido kamikaze, estrellándote una y otra vez con las mismas rocas o si nos vamos tu y yo a una nave y nos estrellamos contra cada roca, juntos.

Hay que ser más valiente para atreverse a sentir, que para huir de lo inevitable.
No aparentas ser más fuerte por actuar como si no significara nada para ti, no ganarás nada tratándola como no se merece, no sentirás menos solo por no ser dulce con ella, pero la perderás si sigues haciéndolo.
No harás desaparecer tus ganas de ella solo por no acariciarla, no evitarás caer en sus labios solo con no mirarlos, no conseguirás engañar a tus latidos nunca, pero los suyos dejarán de ir tan rápido cada vez que te ven si no haces nada por evitarlo.
Tú mueves, tu eliges: o te dejas de idioteces y te dejas llevar o... la pierdes.
Piénsalo bien, porque puede que le cueste partir... pero ella no es de las que vuelve una vez que se ha ido.

Déjame entrar

En el intento de descubrir quién hay debajo de esa mascara, desaparezco.  Miro en tus ojos, pero puedo ver a través de ellos como si no tuvieran nada que mostrarme, como si tu alma  estuviera vacía de cualquier resquicio de esperanza. 

No perdería el tiempo en intentar que me dejes entrar si no supiera que hay algo dentro de ti gritando, sin tener el valor de volver a mostrarse. Pero necesito saber que hay algo mas que esa estúpida máscara que te aparta de lo real, necesito descubrir quién solías ser.

No vengo a atacarte, no vengo a hacer desaparecer el ultimo soplo de confianza que queda en tu corazón, vengo a que éste me mire a los ojos y no tenga miedo de salir.

Pero para ello tienes que querer dejarte llevar, me pregunto si serás capaz.