Visitas :)

miércoles, 22 de junio de 2011

¿Límites? No, cobardía

En este tiempo de vagar a solas por mis recuerdos, he aprendido que ser valiente no significa vencer a una bestia enorme, ni ganar premios por ello. Ser valiente, es enfrentarte a esa bestia aun sabiendo que puede aplastarte, aceptando la realidad de que puedes perder y tener el valor de luchar. Eso es ser valiente.
Hace tiempo me creía una cobarde, pues la bestia siempre acababa venciéndome, yo no era nada, no valía nada…O eso pensaba yo.
Fue hace unos días cuando me di cuenta de que estaba llena de valentía, de que mi corazón era guerrero, luchador y que ni mucho menos era una cobarde. No dejaría que nadie más que me llamara así. Nunca.
-¿Porqué crees eso? ¿Por qué dices que eres valiente? ¡Pero si corres tras causas perdidas! Jajajaja- todos a mi alrededor se reían, no había nadie que me mirara con complicidad.
En ese momento creía que la bestia enorme; la gente, sus opiniones, su poca fe en mí… acabaría aplastándome. Fue entonces cuando les mire, calmada, amenazante y les dije:
-¡Por eso mismo soy valiente! Porque no me rindo, porque corro tras una aparente causa perdida porque confío en mí y en mi capacidad de lograr cualquier cosa que me proponga. Acaso tú, o tú , o tú… ¿Sois valientes?¿ Habéis luchado alguna vez por aquello que tanto anheláis, que tanto deseáis aun sabiendo que hay miles de rocas con las que caeréis?
El silencio llenaba aquel lugar.
-Lo que imaginaba… cuando seáis capaces de dejar atrás vuestros miedos, cuando corráis detrás de algo aparentemente imposible, confiando en que lo lograreis, cuando aceptéis con la cabeza bien alta que la bestia os hundió… entonces, entonces aceptaré que os riais de mí. Mientras tanto, sentiré pena por vosotros. Pues la valentía no la tienen los soñadores, sino los luchadores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario